CC-PNC denuncia que el Gobierno de Canarias incumple en su primer presupuesto sus propias promesas electorales

Barragán: “El Gobierno obvia sus propias previsiones sobre la economía y decide subir los impuestos”

 

El portavoz del Grupo Nacionalista Canario, José Miguel Barragán, ha calificado de incomprensible que el Gobierno de Canarias haya decidido subir los impuestos a los ciudadanos cuando el análisis de partida para la elaboración de los prepuestos dibuja “una situación económica incierta y con datos que no invitan al optimismo”.

 

Para Barragán, el diagnóstico económico del año 2020 es acertado desde el punto de vista del contexto internacional, europeo, español y canario “pero en las cuentas presentadas por el vicepresidente del Gobierno y consejero de Hacienda, no se hace un ajuste en base a esas previsiones ni se diseñan medidas especificas para inyectar más dinero en la sociedad que puedan servir de contención a la previsible crisis económica”.

 

Para el portavoz de Grupo Nacionalista, las reformas fiscales, aunque necesarias, deben ser estudiadas y abordadas teniendo en cuenta la situación real, no basándose en un programa electoral o debate de investidura, “que está bien para fijar una hoja de ruta pero que debe ser reflejo de la situación económica real”.

 

En este sentido, “consideramos que los presupuestos están desequilibrados entre las partidas destinadas a los servicios sociales y los destinados a la inversión y empleo y renuncian a pelear por todo aquellos que nos debe el Estado”.

 

Por otra parte, y a pesar de que el gobierno del cuatripartito insiste en el carácter social de su presupuesto, el portavoz denuncia que no se aplica  el compromiso de la aplicación de la Ley de Servicios Sociales de incrementar 55 millones cada año.

 

Finalmente, José Miguel Barragán no pudo sino mostrar su asombro ante el error de cálculo del Gobierno de Canarias sobre las previsiones del superávit que pasan de 99,2 a 311 millones de euros, cantidad que viene a contradecir, una vez más, la subida de impuestos, unido al anunciado destino de 558 millones de euros a pagar a los bancos”.