Carta abierta al equipo de Jóvenes Nacionalistas de Canarias

El 20 de Mayo mis compañeros me elegían Secretario General de los JNC (Jóvenes Nacionalistas de Canarias). Cierto es que era algo que me hacía ilusión, tenía y tengo las ganas y la confianza intacta para trabajar por Canarias, además había una cuestión bonita también, ser el primer secretario general de JNC de Lanzarote, pero no es menos cierto que las dudas siempre están.

Tenía 28 años, había terminado el Grado en Ciencias Políticas, y se me presenta esta oportunidad, ilusionante desde luego, pero como casi siempre, cuando uno abre una etapa nueva en su vida, los miedos le corroen, esas hormiguillas por el cuerpo, esos pensamientos «y si no estoy preparado», «y si defraudó a mis compañeros», «y si me da vértigo»; en definitiva, que podía aportar un chico de Argana Alta a Canarias, y otros «y si» que como son lógicos en un chico joven que entra en la política nos surgen.

Han pasado diez meses, intensos, muy intensos, de muchísimo trabajo, de muchos viajes que créanme cuesta compaginar con mi trabajo en la empresa privada. Diez meses donde la organización se ha renovado en todas las islas, donde hemos impulsado la creación de una comisión de igualdad con objetivos muy claros y retos en materia LGTBI fundamentales para entender la Canarias actual, donde hemos lanzado un proyecto clave para nosotros en materia de cuidado y concienciación del entorno y el medio ambiente como es el proyecto ‘Confianza en el Cambio’ con el peinamos Canarias limpiando de plástico y basura nuestras playas, montes o barrancos intentando crear conciencias colectivas sobre la importancia de cuidar y proteger nuestra tierra. Nos hemos reunido con los colectivos animalistas para comprender y aportar a la Canarias que estamos intentando dibujar, con asociaciones feministas para crear la Canarias definitiva en la que el género no sea una condición diferenciadora, diez meses en los que hemos recuperado la calle habiendo estado en este tiempo en cinco de las ocho islas recuperando el tú a tú con nuestra gente, conociendo cada isla, sus calles, sus lugares emblemáticos, acudiendo a manifestaciones, reivindicando la igualdad salarial, la reivindicación de derechos LGTBI, abriendo un debate social desde la octava isla, La Graciosa, para la inclusión de esta en la bandera que los canarios y las canarias consideramos como nuestra, reuniéndonos con varios directores generales, para conocer y reclamar acciones fundamentales como la adecuación y modernización de la Ley Canaria de Juventud, para escuchar, debatir y aportar al anteproyecto de ley de tenencia y protección de animales, para conocer las acciones que se estaban llevando a cabo en servicios sociales, en transporte, y un largo etcétera. Incluso abrimos un proceso de participación histórico para que nuestra imagen corporativa la crearan los jóvenes canarios independientemente de su filiación política.

Estas son solo una parte de las cosas que me han pasado en diez meses, después de todos esos «y si» del principio, pero lo más bonito ha sido conocer a todos esos jóvenes de cada uno de los rincones de esta bendita tierra con una vocación inexplicable por cuidar Canarias, por mejorarla, por tratar de ayudar a todos los jóvenes y no jóvenes de esta tierra a que vivamos mejor. Desde el primer compañero, hasta el último, no tengo sino palabras de agradecimiento, charlas, anécdotas, trabajo y más trabajo me están enriqueciendo tanto a nivel personal como profesional.

El comité permanente, los secretarios insulares, los compañeros y compañeras que no son miembros de órganos nacionales y que se desviven por la organización, por Canarias. Un equipo enorme, con una calidad humana que peina todos los días cada barrio, cada municipio, cada isla. Chicas y chicos que son parte de la calle, de asociaciones, organizaciones, colectivos, clubes deportivos…

Son ellos el verdadero motor de esta organización, son ellos quienes me han enseñado que a los «y si», se les combate en equipo, con trabajo, humildad, compañerismo. Que el reto de la vida, de la política es tener un equipo que te haga crecer, y yo tengo la suerte, créanme, de tener el mejor equipo que existe en Canarias.

Ellos son el corazón de Coalición Canaria, el presente de este partido.

Gracias por tanto, seguidos en la brega.

David Toledo es Secretario General de los Jóvenes Nacionalistas de Canarias.